Copy
La nueva entrega de La Bonilista, la lista de correo de bonillaware.com. El newsletter de noticias relevantes para personas importantes ¡Bienvenidos!
Bonillaware S.L.U.

Una Silla Vacía
 


Una de las cosas que más sorprende a los muggles de los programadores son nuestros encuentros y reuniones. Al común de los mortales no le entra en la cabeza que alguien decida, voluntariamente, dedicar parte de su tiempo libre a encontrarse con extraños para hablar de su trabajo.
 
Y lo que definitivamente les deja ojipláticos es conocer que algunos dedican aún más tiempo para preparar charlas u organizar la reunión sin recibir ninguna contraprestación económica a cambio. Esta es una de las peculiaridades más maravillosas de nuestro pequeño mundo. No hace falta más que visitar meetup.com y comprobar como hay encuentros de todo tipo y condición, la mayoría están relacionados con hobbies y aficiones… excepto dos curiosas excepciones: los eventos de networking para entrepreneurs “de canapé y cerveza” y las reuniones de informáticos.
 
Sin embargo, parece que no somos capaces de valorar en su justa medida este pequeño tesoro y a los valientes que consiguen llevarlo adelante. Sólo así se comprende que los maltratemos como hacemos.
 
El jueves pasado, José Manuel Beas se quejó en un tweet de la enésima reunión relacionada con la informática en la que no aparecen ni la mitad de los asistentes “confirmados”, algo que se ha convertido en un mal endémico y que hace más daño de lo que la gente cree, empezando por afectar a la calidad de las mismas reuniones.

 
La Bonilista - Una Silla Vacía
 
Los organizadores asumen que sólo alrededor del 50% de los confirmados asistirán realmente, pero es imposible saberlo con seguridad hasta la hora del evento. Eso ha provocado más de una sala abarrotada… y más de un auditorio medio vacío.
 
Sin tener ni idea de cuánta gente confirmada asistirá, ¿cerraríais la inscripción de un evento cuando alcanzarais el límite de aforo disponible aún a riesgo de dejar la sala medio vacía y sin entrada a gente que realmente quería asistir? ¿Os atreveríais a buscar –y, muchas veces, a pagar- una sala más grande, aún a riesgo de que no apareciera la mitad de la gente?
 
¿Y que decir de intentar buscar y cerrar patrocinios? Me gustaría que vierais la cara que se te queda cuando convences a una empresa de que mande a algún técnico relevante para hablar delante de 50 personas y aparecen sólo 10… para los que has comprado 15 pizzas tamaño familiar.
 
Excusamos nuestras ausencias la mayor parte de las veces por imprevistos laborales, pero ¿de verdad tenemos que apagar tantos fuegos en el trabajo? ¿Son verdaderos incendios o simples fogatas? ¿No solucionaríamos muchos de esos “imprevistos” si de verdad planificáramos como una cita ineludible las reuniones a las que nos hemos comprometido a ir?
 
Yo creo que muchas de esas ausencias tienen más que ver con que el mundo se ve diferente después de ocho o nueve horas currando y cuando tienes a la misma distancia la reunión técnica a la que te apuntaste con entusiasmo y el sofá de tu casa. A todo el mundo le pasa, a mí el primero.
 
La última “reunión informal” a la que asistí fue de gente de la industria del videojuego. La única persona que conocía, mi Cicerone, fue baja el mismo día del evento. No sabía qué me iba a encontrar ni a quién me iba a encontrar. Me apetecía mil veces más marcharme a mi casa, ponerme el pijama y jugar con mis hijos, pero fui.
 
Fui porque me había comprometido a hacerlo. Pero ir o no ir no es el problema. El problema es apuntarse a algo como acto reflejo porque no nos cuesta nada. Sin ni siquiera pensar si te apetece de verdad o si verdaderamente podrás ir. Pero, sobre todo, sin pensar en la persona que se enfrentará a tu silla vacía.


 

Si te ha gustado, pinta, colorea, copia y distribuye:

Like La Bonilista: Una Silla Vacía on Facebook share on Twitter Google Plus One Button


4.153 tarugos han recibido esta Bonilista.

(Ilustración original cortesía del dibujolari Hugo Tobio)

¡Apoyar a la Bonilista es fácil! Sólo tienes que hacer ejerciciocomer empanadas y jugar con tus videojuegos favoritos.

Copyright © 2015 Bonillaware, Todos los derechos reservados.
Email Marketing Powered by Mailchimp