N.º I
Primavera 2017
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Editorial


Apreciados amigos:

Es un placer presentaros la newsletter de la
Cátedra Universidad y Región del Conocimiento, que hemos elaborado con el objetivo de poner voz a un proyecto deseado por todos, como es el de impulsar la Cataluña Sur como región del conocimiento.

La newsletter tendrá carácter trimestral y permitirá reunir y generar documentación en torno al propio concepto de región del conocimiento y al papel que la Universidad tiene en su desarrollo. En ella se dará voz a los principales actores implicados en el proyecto Cataluña Sur: Región del Conocimiento. Además, se presentarán temas de actualidad y se difundirán eventos y publicaciones relacionados con la temática. Nuestra intención es atraer vuestro interés y fomentar vuestra participación. Por esta razón, la plataforma que se presenta se concibe como un sistema abierto al diálogo a partir de los artículos e iniciativas que proponemos para cada una de las ediciones.

Deseamos que disfrutéis con su lectura y os invitamos a participar en el proyecto Cataluña Sur: Región del Conocimiento para hacer de él una realidad basada en el proyecto común europeo, fundamentado en el desarrollo inteligente, cohesionado y sostenible.
 
Francesc Xavier Grau
Director de la Cátedra Universidad y Región del Conocimiento

Presentación Cátedra Universidad y Región del Conocimiento


La Cátedra Universidad y Región del Conocimiento es una iniciativa conjunta de la Universidad Rovira i Virgili (URV) y de la Diputación de Tarragona, que cuenta con el apoyo del Banco Santander. En el fondo, la Cátedra se fundamenta en una realidad poco compartida: Cataluña Sur (Camp de Tarragona y Terres de l’Ebre) tiene una dimensión social y económica apropiada y todas las características para ser reconocida y evolucionar hacia una Región del Conocimiento, en el marco de la política regional europea. La Cátedra se crea, así, para catalizar la Región del Conocimiento Cataluña Sur, y, facilitar y contribuir a la organización de su sistema de gobernanza.

Una cátedra universidad-sociedad es una estructura con finalidad académica; como tal, la CUR promueve la diseminación de conocimiento especializado relacionado con el desarrollo regional ligado a la actividad universitaria, y a acompaña a la Universidad en su acción de especialización inteligente regional, orientada a mejorar el bienestar de los ciudadanos.

La estrategia de la CUR para conseguir sus objetivos sigue el hilo y el razonamiento fundamental presentes en la estrategia Europa 2020: el mejor desarrollo, el desarrollo inteligente, debe ser sostenible y también cohesionado a lo largo de toda la Unión Europea; se deben desarrollar todas las regiones, y cada una debe identificar sus potencialidades. Exactamente el planteamiento que se hizo hace ocho años con el Proyecto Tarragona Región del Conocimiento, con una salvedad no menor: como se ha visto, Europa se centra en las regiones denominadas estadísticamente NUTS2, que poseen cierta capacidad de definir políticas propias.

La existencia operativa de una región del conocimiento se puede definir cuando, efectivamente, existe la capacidad, a escala regional, de diseñar, acordar y ejecutar planes de actuación con relación al desarrollo de una estructura social y económica (más) basada en el conocimiento, y de llevar a cabo su seguimiento y reformulación. Así pues, el proyecto que plantea la CUR es el de contribuir a desarrollar los medios materiales y los espacios políticos necesarios para hacer posible la operatividad y estabilidad de Tarragona como región del conocimiento.

Para conseguir este objetivo, la CUR propone tres ejes de actuación para la Cataluña Sur, Región del Conocimiento. En primer lugar, la identificación, recopilación y armonización de todos los proyectos activos que contribuyen de alguna forma a las direcciones identificadas por los indicadores anteriores, la mayoría de los cuales se han desarrollado al amparo del proyecto Tarragona Región del Conocimiento, impulsado por la Diputación y la URV, así como del proyecto Campus de Excelencia Internacional (CEICS), que la URV ha desarrollado, con los mismos objetivos, aprovechando las convocatorias CEI del MECD. En segundo lugar, el desarrollo de un sistema integral de información, a partir de los indicadores seleccionados inicialmente y los que se añadan, abierto a todos los agentes implicados y base del espacio de decisión estratégica de la región. Por último, y más determinante, la configuración de un espacio de decisión estratégica de la Cataluña Sur, a partir de las experiencias desarrolladas en los últimos años, que posibilite la compartición del conocimiento y la participación, a diferentes niveles, de todas las partes implicadas (empresas, asociaciones empresariales, sindicatos mayoritarios, entidades sociales..., junto con la Administración, la Universidad e instituciones de investigación e innovación) y que permita a los responsables políticos la toma informada de decisiones conjuntas a escala regional.

Con estos objetivos, general y particulares, durante el 2015 la CUR constituyó el Comité Asesor Externo (CAE), que apoya/aconseja al director de la Cátedra en la estrategia y los proyectos de la Cátedra, dada la realidad de Tarragona y la URV. El CAE está constituido por John Goddard, Ellen Hazelkorn, Francisco Michavila y Jaana Puukka. El CAE realiza dos visitas anuales a Tarragona para entrar en contacto directo con representantes y exponentes de la región.

En cuanto a la investigación y la transferencia de conocimiento, la Cátedra ha organizado desde su creación seminarios en los que han participado el Comité Asesor y el Grupo Nuclear y que han permitido orientar la toma de decisiones a corto plazo. Además, cabe destacar la relación con algunas regiones europeas de referencia, como por ejemplo la región de Tampere (Pirkanmaa, Finlandia), con las que se ha establecido una relación profesional que ha permitido conocer de primera mano el sistema de toma de decisiones, el posicionamiento estratégico de la región, y, la participación e implicación de los diferentes estamentos: ciudad de Tampere, universidades y empresas. A partir de estas actividades, con un elevado componente de aprendizaje, se ha hecho un alineamiento de las principales conclusiones obtenidas, que permite identificar los principales ejes de actuación.

La necesidad de la organización de la región Cataluña Sur se identifica tanto de abajo arriba (quizá de forma aún no suficientemente ordenada) como de arriba abajo. Y es este sentido el más relevante, dado que constituye finalmente la principal motivación que la región como tal, Cataluña y Europa se desarrollen mejor, de forma más cohesionada y sobre la base del conocimiento. Así pues, cualquier avance debe fundamentarse en la compartición de estos objetivos entre los protagonistas y los responsables de la región y del Gobierno de Cataluña. Esta es una condición sine qua non; sin una concepción compartida de la necesidad y las finalidades del proyecto no se podrán superar las dificultades intrínsecas que ya se han identificado. Está claro que los responsables que forman parte del GNI señalaron dicha concepción desde el principio y que forma parte de las primeras tareas que se deben llevar a cabo en el avance hacia un sistema regional de gobernanza.

Por ello, la CUR, de acuerdo con todos los miembros del Grupo Nuclear Impulsor y con la valoración favorable del Comité Asesor, se propone impulsar durante 2017 las siguientes actuaciones:
  1. Constituir un grupo nuclear ampliado que gane representatividad en la región y pueda asumir la propiedad del proyecto. La necesaria operatividad de este grupo recomienda la adopción de un criterio transparente que mantenga un número bastante reducido de miembros y que garantice la representación de toda la región.
  2. Poner en marcha un ejercicio colectivo de prospectiva, un Foresight Exercise, que el Grupo Nuclear promoverá como un viaje colectivo destinado a crear confianza y desarrollar una visión reflexiva y compartida de la evolución futura de la Cataluña Sur, y al que se invitará a participar a instituciones, entidades y representantes de intereses empresariales y sociales de la región.
  3. Desarrollar, a corto plazo, un conjunto de iniciativas regionales viables a partir de las conclusiones sobre actuaciones necesarias recogidas en la figura 19, para sustentar con resultados las primeras etapas del proceso y reforzar el compromiso de los actores del ecosistema, que serán sus responsables finales. Entre estas cabe destacar:
    1. Programa Regional de Capacitación de Liderazgo. Dirigido a un primer grupo de líderes de la región en los ámbitos políticos y socioeconómicos, que podría seguir, en paralelo con el ejercicio de prospectiva, un programa de formación compuesto por tres líneas: tendencias y desafíos emergentes de la sociedad, políticas de desarrollo regional y habilidades de liderazgo.
    2. DEMOLA Cataluña Sur. Siguiendo la experiencia DEMOLA, surgida en Tampere, se propone implantar una actividad docente en la URV, en colaboración con ciudades, empresas y ONG, que permita a los estudiantes de la URV interactuar con la finalidad de desarrollar soluciones de interés para estos actores, en paralelo a su formación en capacidades en herramientas creativas y de innovación.
    3. Club Internacional Cataluña Sur. Se propone la creación de una plataforma Cataluña Sur que reúna talentos extranjeros que viven en la región a fin de desarrollar una comunidad innovadora y comprometida con el desarrollo de la Cataluña Sur y con la conexión de la región en el ámbito internacional.
  4. Procurar que, en paralelo al liderazgo del GNI, se desarrolle un modelo de gobernanza para la región que se pueda hacer cargo de los resultados de la prospectiva y de la cartera de iniciativas regionales y que, finalmente, haga posible que la región lleve a cabo su planificación regional y las actuaciones de desarrollo regional que se deriven de su propia estrategia.
  5. Colaborar con la Diputación en la definición del sistema de información de la Cataluña Sur y de los indicadores que debería contener.
Finalmente, el objetivo que se plantea la CUR, de acuerdo con el Grupo Nuclear Impulsor  y el Comité Asesor, es desarrollar una propuesta global y concreta de sistema de gobernanza para la Cataluña Sur en el margen temporal que permite el actual período de gobiernos municipales, es decir, antes de mediados del 2018.

En definitiva, la Cátedra trabaja para impulsar Cataluña Sur como Región del Conocimiento, para hacer posible su operatividad y estabilidad, contribuyendo, entre otros, a desarrollar un sistema de gobernanza, al tiempo que, contribuye en la diseminación del conocimiento especializado en el concepto de región del conocimiento y el participación de la universidad.

Francesc Xavier Grau
Director de la Cátedra Universidad y Región del Conocimiento

URV and Southern Catalonia as a Region of Knowledge: the global context

 

by John Goddard and Ellen Hazelkorn



Is higher education serving the public interest?                                                                    
This note links our interest in how universities manage their engagement with civil society, as reflected in our recently published book, The Civic University: the Policy and Leadership Challenges with our role as advisors to the newly created Chair for University and the Knowledge Region at URV.
[i]

To put the work of the Chair in its global context, it is clear that the Brexit vote and the United States presidential election, as well as votes in Italy and Austria, highlight a growing gap between elites and others in society. In so doing, they attack some fundamental values of higher education – multiculturalism, international collaboration, free flow of people, ideas and capital and liberal social values.

As questions are asked about the relevance and value of many public institutions, the public is also asking whether higher education is serving its interests. Those interests inevitably vary depending upon who is asked – students, parents, employers, and politicians representing particular places.

While there is a consistent view that a university education is important and highly valued, surveys show concerns about the cost and relevance of higher education by many people who are unaware of the sector’s diverse functions and contributions to society, not least to the places where people live and work.

These tensions highlight an underlying message. While higher education has historically had a close relationship with the city/region as well as country of its founding many institutions are to being considered part of the elite – as islands of affluence surrounded by less developed communities. Thus, how higher education engages with its publics – beyond its campus walls and academic community – is coming under increasing scrutiny.

Growing elitism

There is strong research evidence of increasing differentiation and stratification between elite and non-elite institutions and their students. The pursuit of ‘world-classness’ is driving a wedge between institutions and their communities in terms of shifting strategies and priorities away from local and regional priorities toward global recognition on purely academic grounds. Perhaps, not surprisingly, some universities find their campuses referred to as representatives of an ‘insulated political culture’.

There is no single blueprint. But there is the necessity for higher education institutions to learn from each other and, by working together, to develop frameworks for institutional leadership and management that recognise the importance of civic engagement and institutionalise this activity into the academic structure and professional support mechanisms of the university.

Failure to treat this agenda more seriously could see an ever-widening gap opening up between higher education and its publics. After all, and regardless of changes in the proportion of direct state funding universities receive, they remain dependent upon society for both core teaching and research funding. This means public responsibilities cannot be ignored.
 
Civic engagement by universities

While civic engagement may be in vogue, there is little consensus about what the concept means. There are three broad models of higher education engagement, each with different implications for organisation, management and leadership within higher education institutions.

The social justice model focuses on students, curriculum and pedagogy. It emphasises community-based research, community-based learning, volunteering and knowledge exchange activities. Accordingly, the key responsibility usually lies within the student or access office, or within teaching and learning or continuing education.

At the other end of the spectrum, the economic development model focuses on the commercialisation of research through intellectual property deals, technology transfer, and new business formation. Responsibility tends to lie with the research and technology transfer office or associated business liaison functions. In these two models, civic engagement is assigned to a ‘third pillar’ – or parallel set of activities.

In contrast, our public good model sees engagement wholly embedded within and across all functions and units of the university. Acting as a bridge across teaching and research, it is supported by a distributed or matrix organisational and leadership framework. However, achieving a holistic approach along these lines is much easier said than done – which is why many institutions choose the path of focusing on either community or enterprise engagement.

Despite the underlying presumption that engagement is a relatively simple and uncontested process, the fact that universities and their stakeholders both operate in complex and messy environments needs to be recognised.
 
URV and Southern Catalonia

In seeking to work with a range of stakeholders to develop Southern Catalonia as a Region of Knowledge, URV is taking important steps to develop its public good role. It is helping the region raise its European profile, seeking to ensure that it is not overshadowed by the growth of Barcelona and surrounding areas.
It is doing this through the creation of a Chair for the University and the Knowledge Region that brings together two hither to areas of expertise – higher education management and regional  development. The plans of that chair are far reaching namely:
  • Creating a Steering Group comprising representatives from the 10 towns or cities in the region with over 20,000 inhabitants, the first vice-president of Tarragona Provincial Council (which will ensure the representation of the smaller municipalities), the two representatives of the Camp de Tarragona and Terres de l'Ebre Territorial Services, and the Secretary of the Government of Catalonia;
  • Conducting a  Foresight Exercise as a collective journey aimed at building confidence and developing a shared and reflective vision of the possible future development of Southern Catalonia owned by university, public authorities and  representatives from businesses and civil society;
  • Developing a set of regional initiatives and projects to ensure that results are produced in the early stages of the Foresight process and so help reinforce the commitment of all the stakeholders; and
  • Benchmarking Southern Catalonia against one of Europe’s most innovative regions –  Tampere in Finland.
From our experience URV is a leading institution in the way that it aims to be globally excellent and regionally engaged. At the same time as creating mechanisms internally to embed civic engagement in the heartland of the university, it is actively contributing to shaping the governance of the region so that business, public authorities and civil society can, in partnership, co-produce and absorb knowledge generated by and through the university.
 
This article draws  on Ellen Hazelkorn and John Goddard (2016) “Is higher education serving the public interest?”, University World News, 18 December. Issue 441.
http://www.universityworldnews.com/article.php?story=20161212222518282

Entrevista: Josep Poblet


Josep Poblet es alcalde de Vila-seca y presidente de la Diputación de Tarragona. Sus más de 30 años al frente de instituciones públicas definen su trayectoria política. Licenciado en Geografía e Historia, en 2009 impulsó con la Universitat Rovira i Virgili un proceso para desarrollar un modelo económico basado en el conocimiento, que hoy es una de las líneas estratégicas que la Diputación desarrolla en su Plan Estratégico 2015-2019 y que tiene su reflejo en la Cátedra Universidad y Región del Conocimiento.

- La Diputación de Tarragona y la Universitat Rovira i Virgili decidieron impulsar la creación de la Cátedra Universidad y Región del Conocimiento. ¿Qué lleva a la Diputación a promover Cataluña Sur como región del conocimiento?

El sur de Cataluña es un espacio regional que cuenta con potencialidades de carácter económico, social, cultural, industrial y tecnológico, las cuales nos llevaron a plantear la necesidad de desarrollar un modelo socioeconómico basado en el conocimiento. Lo que se perfiló como una de las líneas estratégicas de la Diputación contó con el impulso de la Unión Europea a partir de la estrategia Europa 2014-2020, que aboga por un desarrollo regional sostenible y cohesionado. La Diputación ya había apostado en 2007 por establecer una alianza estratégica con la Universitat Rovira i Virgili para desarrollar un modelo inteligente basado en la innovación como elemento potenciador de las capacidades del territorio, y en 2014 decidió impulsar la Cátedra Universidad y Región del Conocimiento.

- ¿Qué ventajas ofrece que Cataluña Sur sea una región del conocimiento?

Convertirse en región del conocimiento no significa alcanzar un estatus determinado que confiera ventajas o privilegios a la región; significa que nuestra sociedad tiene una dinámica, una actividad social y económica basada en el conocimiento y que, por tanto, es más rica y competitiva. Ser una región del conocimiento implica tener una mejor sociedad.

- Las regiones del conocimiento tienen unas singularidades propias que son inherentes a las dinámicas de su territorio. ¿Cuáles de ellas destacaría?

El sur de Cataluña se caracteriza por tener una situación estratégica, que la hace poseedora de infraestructuras como el Puerto de Tarragona o el Aeropuerto de Reus; al mismo tiempo, constituye uno de los principales puntos del futuro Corredor del Mediterráneo. Su industria rica y variada aglutina sectores muy diferenciados como la química, la energía, la industria agroalimentaria, el turismo y el patrimonio histórico y natural. Además, la Universitat Rovira i Virgili es un referente de educación superior en la región, presente en los principales rankings globales, que apuesta por la investigación y la innovación a partir de su red de centros tecnológicos. Ante todo, es una universidad que forma a personas y que, por tanto, garantiza una ciudadanía que constituirá el motor de la región de especialización inteligente.

- ¿Qué carencias tiene la región que puedan suponer retos para el proyecto?

La carencia más destacada es la asimilación del concepto de región del conocimiento, de modo que el principal reto pasa por compartir de forma generalizada que Cataluña Sur puede convertirse en una región de estas características. En este sentido, falta coordinación entre los distintos actores implicados. Precisamente, la Cátedra Universidad y Región del Conocimiento nace para trabajar en esa dirección.

- ¿Qué actores deberían estar implicados en el proceso?

Para gestionar el proyecto Cataluña Sur, Región del Conocimiento es necesario crear un equilibrio dinámico entre diversos actores. Este sistema implica la coordinación entre la comunidad, el sector privado y el ámbito académico, pero también a la sociedad civil. Con todo, la principal responsabilidad y el protagonismo recaen en los responsables públicos, que, por este motivo, han sido elegidos.

- ¿Cuál cree que es el papel que la Diputación debe asumir en este proceso?

El papel de la Diputación debe ser el de actuar como “ente de carácter supralocal que presta apoyo a personas, municipios y comarcas en favor del equilibrio territorial y la equidad del conjunto en lo relativo a servicios y calidad de vida, actuando como un agente efectivo de transformación progresiva de la realidad socioeconómica y de generación de nuevas oportunidades”. Esta estrategia se seguirá fomentando en el proceso para impulsar Cataluña Sur, Región del Conocimiento. Sin embargo, falta definir el modelo de gobernanza y el papel que deberá tener en él la Diputación.

- Una de las principales características de una buena región del conocimiento es tener un buen sistema de gobernanza. ¿Cómo debería ser el sistema de gobernanza de la región Cataluña Sur?

El desarrollo de un nuevo sistema de gobernanza debe ser objeto de una reflexión estudiada y consensuada. Sin duda, la participación de diversos actores implicados en el proceso de configuración y gestión de una región del conocimiento garantizará el éxito del modelo que se plantea. En este sentido, los modelos existentes, que aglutinan los elementos de la cuádruple hélice —la comunidad, el sector privado, el ámbito académico y la sociedad civil—, son modelos a seguir, pues permitirán configurar un sistema de toma de decisiones estratégicas orientado a mejorar la calidad regional de todos los sectores implicados, tanto económico como social.

- Uno de los factores de éxito de las regiones del conocimiento es la participación social. Para conseguirla se debe concienciar a la sociedad de la importancia de convertirse en región del conocimiento. ¿Cómo prevé la implicación de los diversos colectivos en el proceso?

La sociedad es el motor de la región. Por esta razón, es una necesidad primordial implicar a los diversos colectivos en el proceso hacia una región del conocimiento. La inclusión de los colectivos empieza por la diseminación del proyecto, así como por establecer puntos de contacto y encuentro con los diversos actores, de forma que puedan interactuar y aportar nuevas ideas. Nos debemos dotar de plataformas de participación que permitan la elaboración de visiones compartidas y garanticen el seguimiento y la evaluación de proyectos estratégicos.

- ¿Cómo prevé la participación del tejido empresarial e industrial en la evolución hacia una economía del conocimiento?

Al final, a las empresas les corresponde el papel más determinante: son las que crean riqueza, y si su actividad está más basada en el conocimiento, generan aún más riqueza. La globalización ha impulsado la investigación y la transferencia de conocimiento e inversiones hacia la I+D+I y la internacionalización. El hecho de convertirse en región del conocimiento supondría un valor añadido para el tejido empresarial en lo que respecta a la apertura de mercados y ejecución de estrategias de futuro basadas en la innovación y la internacionalización. Además, las inversiones posibilitarían un incremento de la competitividad de las empresas y de los centros tecnológicos.

- ¿Cuál será la evolución de Cataluña Sur como región del conocimiento de aquí a cinco años? ¿Se habrá alcanzado alguno de los objetivos de trabajo previstos?

La identificación de la oportunidad de especialización inteligente del territorio facilitará el posicionamiento de Cataluña Sur como región del conocimiento y la consecución de los objetivos establecidos, que serán claves en un futuro próximo para el despliegue armónico, cohesionado y sostenible de este proyecto. Algunos de estos objetivos son la creación de nuevos puestos de trabajo vinculados al conocimiento, la articulación de una nueva industria basada en el conocimiento, el refuerzo de la competitividad de los sectores productivos y la mejora de la cohesión social.

Descubriendo regiones del conocimiento europeas: Tampere, Pirkanmaa, Finlandia

 
En esta sección descubriremos territorios identificables con el concepto de región del cono­cimiento que se han desarrollado en los últimos años en Europa. Este breve análisis nos permitirá conocer algunos aspectos clave y las principales potencialidades de regiones que se han convertido en regiones del conocimiento, y nos servirá, por tanto, para aproximarnos al modelo de trabajo estratégico que debería seguir Cataluña Sur con ese mismo propósito. Su lectura, además, facilitará la presentación de conceptos y variables entre diferentes regiones del conocimiento.

La primera edición presenta la región de Tampere (Finlandia),
un referente a nivel europeo, que visitaron algunos miembros de la Cátedra Universidad y Región del Conocimiento para conocer de primera mano su realidad y sus proyectos de futuro.

REGIÓN DE TAMPERE

La demarcación administrativa de
Tampere (Pirkanmaa) es una de las principales regiones del conocimiento en el contexto europeo. Está situada en el suroeste de Finlandia, a una distancia de 150 km de Helsinki. La región se articula alrededor de la ciudad de Tampere (215.000 habitantes), que constituye la segunda concentración demográfica nacional, mientras que la población regional asciende a los 500.000 habitantes, por lo que es catalogada como NUTS3.

Sistema educativo universitario

En la región hay tres universidades: Universidad Tecnológica de Tampere
(Tampere University of Technology, TUT), Universidad de Tampere (University of Tampere, UTA) y Universidad de Ciencias Aplicadas de Tampere (Tampere University of Applied Sciences, TAMK).

Las instituciones educativas tienen un significativo papel a nivel regional, pues participan activamente en el desarrollo de la región y colaboran en distintos proyectos y plataformas con el tejido productivo.

El papel regional de estos centros se debe analizar en conjunto, fruto de la existencia de un proyecto común,
Tampere3, que tiene por objetivo crear un ambiente atractivo y dinámico para desarrollar una “investigación multidisciplinaria, inspiradora e internacional mediante la creación de una nueva institución universitaria conjunta”. Es preciso destacar que se trata de una región en la que uno de cada cinco habitantes es estudiante (35.000 estudiantes universitarios) y donde las instituciones universitarias tienen entre sus principales objetivos la atracción de talento externo a su entorno.

Investigación, desarrollo e innovación (I+D+I)

La región de Tampere representa el 9,2 % de la población finlandesa y el 6,8 % del PIB nacional, y recibe el 15 % de la inversión nacional en I+D+I. Esta financiación facilita sin duda su dinamismo y el potencial de la investigación. En este sentido, una de las principales características que se identifican en ella es el impulso de plataformas que promueven la innovación y la colaboración territorial.

Durante los últimos años se ha implementado una estrategia que da impulso a las plataformas abiertas de innovación, como un paso adelante respecto del modelo anterior, basado en los clústeres.

Existen diversos ejemplos, como
New Factory, centro de innovación e incubadora de empresas cuyo objetivo es poner en contacto a emprendedores, estudiantes, investigadores, inversores y expertos procedentes de diversos sectores para impulsar la cocreación. Paralelamente, existe Global Tampere Education (GTE), “un espacio de encuentro en que actores vinculados a la educación pueden desarrollar productos educativos, buscar socios y clientes y promover la educación finlandesa en el mundo”.

Uno de los instrumentos de Tampere que cuenta con más reconocimiento en el exterior es la red
Demola, que facilita “el encuentro entre estudiantes universitarios y empresas” y que trabaja creando equipos interdisciplinarios para afrontar retos regionales y globales. El éxito de este proyecto ha propiciado su expansión internacional y su afiliación en diferentes territorios del mundo, como Vilnius, Budapest, Suecia, País Vasco, islas Canarias y Dinamarca, entre otros.

La gestión y promoción de la I+D+I es un potencial evidente en la región de Tampere, en la cual, a partir de un sistema de gobernanza adecuado, se buscan estrategias para propiciar la consecución de retos en esta materia. La siguiente figura muestra, a modo de síntesis, los resultados de esta planificación, en comparación con Helsinki y otras regiones.
Perfiles económicos de las regiones de Finlandia según región capital, regiones del conocimiento y tecnología, regiones con recursos naturales y la región de Tampere. Fuente: tampereallbright.fi.
De la región Tampere destacan algunos indicadores que le otorgan un valor añadido en relación el gasto total industrial, la inversión en I+D+I per cápita y el porcentaje de facturaciones de servicios digitales sobre el total, en los que, como se puede observar, supera la media finlandesa.
 
Consideraciones económicas y sociales


Las características económicas de la región se fundamentan en la presencia de sectores como las TIC, las tecnologías de la salud, ingenierías, servicios comerciales de conocimiento (KIBS) y turismo. El predominio de estas actividades económicas ha dado lugar al impulso de una estrategia de branding regional propia vinculada a la innovación y la tecnología.
La transformación actual se enfoca a un entorno basado en plataformas abiertas de innovación que se consolidan en un entorno históricamente marcado por los clústeres en energías renovables, e-learning y salud y bienestar. Aunque la telefonía móvil ha sido importante en el pasado, en los últimos años ha perdido relevancia dentro del actual modelo basado en la economía del conocimiento.

Gobernanza

La gobernanza de la región de Tampere tiene su núcleo en el
Council of Tampere Region. Como institución regional, se encarga de realizar la planificación y la organización de ejercicios de prospectiva territorial en un modelo avanzado donde las entidades municipales participan activamente en la toma de decisiones. Este eje se complementa con colaboraciones subregionales entre municipios.

Además, dentro del núcleo regional, se encuentra una agencia de desarrollo económico que participa en la gestión regional en materia de I+D+I,
TREDEA.

Otros elementos de interés de Tampere son el reconocimiento internacional como espacio de Educación, Investigación y Tecnología. Por otro lado, el Foro Económico Mundial (World Economic Forum, WEF) destacó la colaboración entre universidad e industria en la región. Además, Tampere posee una elevada vinculación con las TIC.

La ciudad de Tampere prevé una inversión de
6.000 millones de euros hasta 2030 para incentivar su desarrollo y participa en el proyecto 6 Cities, una red de colaboración con otras ciudades, entre las que figuran Helsinki, Espoo, Vantaa, Turku y Oulu, que aúnan esfuerzos para desarrollar productos, servicios y soluciones innovadoras a los retos existentes. En cualquier caso, se basa en plataformas abiertas de innovación (open data) que promueven la interrelación y la participación abierta.

Comparativa con Cataluña Sur

Como se ha observado, la región de Tampere constituye un paradigma de región del conocimiento. En este sentido, Cataluña Sur podría seguir un plan estratégico que debería tomar como referentes alguna de las potencialidades de Tampere que se han destacado a lo largo del artículo.

En primer lugar, la existencia y el apoyo al desarrollo de plataformas abiertas de innovación y redes de colaboración como Demola son un buen ejemplo de planificación regional, pues persiguen la transferencia tecnológica de conocimiento, promueven la investigación y fomentan la formación de sus estudiantes en materias de interés, que, a su vez, pretenden dar respuesta a retos regionales e internacionales.

Asimismo, el análisis del sistema de gobernanza de Tampere, regido por el modelo de la cuádruple hélice (cuyas variables son administración pública, universidad, empresas y sociedad), es uno de los elementos distintivos de la región finlandesa. En este sentido, Cataluña Sur debe orientar sus esfuerzos hacia el fomento de la colaboración entre los diferentes agentes. Esta adecuación de la entidad regional se justifica en la necesidad de adaptarse a los retos y necesidades de la sociedad en materia de desarrollo regional y gestión de inversión en I+D+I, y en el apoyo a programas formativos dirigidos a dinamizar el capital humano de la región, como en el caso finlandés.

Además, la gestión de una marca o branding del sistema regional es un elemento distintivo de la región de Tampere, y plantea la necesidad de impulsar una marca propia de Cataluña Sur a escala regional.

Por otra parte, un aspecto equiparable entre Tampere y Cataluña Sur es la proporción de estudiantes, con un 20 % y un 15 % respectivamente.

En conclusión, el análisis de la región de Tampere permite obtener algunas de las características básicas sobre los distintos elementos que tener en cuenta en la creación de un modelo de región del conocimiento. Los ejes principales identificados son los siguientes: plataformas abiertas de innovación, entidad regional como núcleo de gobernanza, ejercicios de prospectiva y estrategias enfocadas a la I+D+I. Evidentemente, estas ideas pueden ser la base para adecuar el modelo finlandés a las dinámicas de Cataluña Sur, pero teniendo siempre presente que el éxito de un modelo regional en un lugar concreto no garantiza que este sea totalmente extrapolable a otra región.
 
Antonio Calero López y Josep Maria Piñol
Miembros del grupo de apoyo de la Cátedra Universidad y Región del Conocimiento
Benneworth, Paul; Gulbrandsen, Magnus; Hazelkorn, Ellen; The Impact and Future of Arts and Humanities ResearchPalgrave Macmillan, 2016.
 
El impacto social de investigación se ha convertido en una cuestión de importancia en las universidades anglosajonas. Este ensayo es una revisión fundamental de las temáticas sobre el impacto social, y especialmente de aquellas relativas al ámbito de las Humanidades.


Grau, Francesc Xavier, Cataluña Sur: Región del ConocimientoPublicacions URV, 2016

El documento Cataluña Sur: Región del Conocimiento es un meticuloso estudio sobre la realidad de las regiones del conocimiento y el papel de las universidades en el mismo, a la vez que establece algunas directrices para desarrollar Cataluña Sur como región del conocimiento. 

Agenda


24-26/04/2017
EUROCITIES Economic Development Forum in Donostia, San Sebastián.

11-12/05/2017
XX Encuentro de Planes Estratégicos, Zaragoza.

22-23/05/2017
Conversaciones en Camp de Tarragona, Teatro Batrina, Reus.

22-24/05/2017
Going global 2017, Queen Elizabeth II Centre, Londres.


06/07/2017
Presentación de la memoria anual de Catalunya. Análisis del Camp de Tarragona y de les Terres de l'Ebre. Tortosa.

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