El mundo no se acaba tras un episodio coronario así. Bien es cierto que hay infartos e infartos. Alguno tiene la mala evolución de antaño, y deja a la persona incapacitada para la vida normal. Dejemos claro, deduzcamos, que en la idea de "vida normal" se incluye, evidentemente, el sexo.
La actividad sexual consume energía, y por lo tanto pone en marcha la respuesta cardiaca ante ese "aumento de la demanda". Pero... ¿cuánta?. ¡Ahí le has dado!
Pues un corazón joven y acrobático, puede responder a una actividad sexual apasionada y también acrobática. Como en cualquier deporte, un corazón se estimula más si está menos entrenado. Pero el hecho de la corta edad hace que la respuesta pueda ser más intensa y exuberante. Se lo puede permitir fisiológicamente.
Si quieres terminar de leer este artículo, pincha aquí.
|