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Te voy a contar lo que me pasó el verano pasado.

Igual te ayuda a entender un poco más cómo funciona la mente del ser humano.

Si tienes clientes humanos quizá te interese, o no...

Estaba con mi mujer en Formentera sin los niños.

El paraíso.

En la gloria.

Un día decidimos ir a la playa que está lo más al norte posible: s'espalmador.

(Esa playa no aparece en ningún listado de playas nudistas)

Tuvimos que andar bastante bajo un sol abrasador cargados con la sombrilla y la nevera.

Al llegar sólo había un hombre practicando nudismo en un lateral de la playa y 4 o 5 personas en bañador, pero con el calor que habíamos pasado para llegar no nos lo pensamos dos veces: 

Nos quitamos toda la ropa y nos metimos al agua.

Una vez refrescados decidimos seguir tomando el sol en la toalla tal y como estábamos.

Al rato llegó una pareja más y también se puso a tomar el sol sin ninguna prenda de ropa.

Poco después llegó otra pareja y siguió el ejemplo dominante en la playa.

Los que estaban con bañador se fueron marchando y la playa se convirtió en 100% nudista.

Hasta que llegaron un grupo de 10-11 amigos de unos 30-35 años.

Serían como 4 chicos y 6 o 7 chicas.

Sólo una de ellas se quitó la parte de arriba.

El resto siguieron con los bikinis completos y bañadores puestos.

Aquí viene el aprendizaje.

No sé de quién fue la idea, pero empezaron a hacerse fotos.

Primero las chicas.

Todas juntas, de espaldas, sin las partes de arriba.

Después de frente, tapándose con las manos.

Ji, ji, ji. Ja, ja, ja.

- "¡Ahora tapándote un pecho con una mano y con la otra un pecho a tu amiga de la derecha!"

Más ji, ji, ji, ja, ja, ja.

- "¡Manos arriba!"

Dijo el de la cámara.

Y ellas obedecieron.

Luego llegó el turno de los chicos.

Primero de espaldas con los bañadores bajados.

Después de frente tapándose con una mano y con el bañador en la otra.

Y ahora viene lo curioso del caso.

Tanto las chicas como los chicos volvieron a ponerse los bikinis y los bañadores.

Pero no para marcharse, sino para seguir un buen rato en la playa.

Si tanto todos tus amigos como el resto de la playa han visto lo que oculta el bikini / bañador ¿qué sentido tiene volverselo a poner?

La respuesta es la presión de grupo.

Si estos amigos al llegar a la playa no hubieran encontrado que todos eran nudistas no creo que hubieran decidido hacerse esas fotos.

Del mismo modo que no se habrían vuelto a poner los bikinis y los bañadores si no lo hubiera hecho nadie de su grupo.

Pero somos seres sociales, e inconscientemente intentamos ser aceptados por el resto.

¿Cómo puedes aprovecharte de esto en tu negocio?

Hay muchas formas.

La más sencilla es la que hacen los restaurantes al sentarte junto a la ventana si eres de los primeros en llegar.

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