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Estaba tomando un café aquí en el pueblo con un par de amigos. Y la conversación derivó a la política.

Normalmente no me gusta hablar de política (demasiadas susceptibilidades), pero qué demonios, un día es un día.

El caso es que uno de mis amigos dice: "el otro día me enteré de una cosa y me quedé a cuadros".

Resulta que un amigo suyo, a quien considera alguien sensato e inteligente... ¡era simpatizante de [Partido Que Le Repugna]!. O sea, ¿cómo era eso posible? ¿Cómo una persona sensata e inteligente podía votar a un partido que, en su cabeza, era la representación de todo lo malo?

Ante este choque de conceptos, el cerebro de mi amigo explotaba. Las dos ideas no podían ser ciertas a la vez. Necesitaba resolver el conflicto de alguna manera, y sólo tenía dos alternativas:

  • Seguir considerando a su amigo como alguien sensato e inteligente. En ese caso, su idea del Partido Que Le Repugna tenía que cambiar. No podía ser tan malo como él creía. Algo bueno debía de tener si alguien sensato e inteligente lo votaba.
  • Seguir considerando al Partido Que Le Repugna como algo vomitivo. En ese caso, su amigo dejaba de ser inteligente y sensato, y descendía al nivel de mandril (que es la consideración que le merece cualquiera que vote a semejante partido).
La verdad, no sé cómo acabó resolviendo la ecuación.

El caso es que éste es un ejemplo de "disonancia cognitiva". Y una muestra de cómo funciona nuestro cerebro (que necesita que el mundo "tenga lógica"... y si no la tiene, se la inventa).

Éste es un tema (el "cómo funciona nuestro cerebro") que no deja de fascinarme. Porque tiene mucho impacto, y no nos damos cuenta.

Me gustó mucho, en ese sentido, el libro "Pensar rápido, pensar despacio" de Daniel Kahneman. Un señor que, pese a ser premio Nobel, explica bastante clara su teoría de "los dos sistemas". Viene a decir (lo resumo muy rápido) que nuestro cerebro funciona con dos sistemas:
  • El Sistema 1 que es el que tenemos por defecto. Es rápido, eficiente en el uso de energía, incluso muchas veces puro subconsciente. Pero no es muy sutil, se basa en reglas sencillas. Aquí se enmarcan los hábitos, las intuiciones, los impulsos, la atención selectiva, los sesgos cognitivos... y también los "agujeros" por los que se nos puede a veces manipular.
  • El Sistema 2 que tiene mucha más capacidad de "pensar" de forma analítica... pero que gasta mucha energía, y por eso solo se pone en marcha en algunas circunstancias. La mayor parte del tiempo vamos a estar funcionando con el Sistema 1... por muy racionales que nos consideremos.
He encontrado este vídeo en Youtube donde, en media hora, se hace un repaso a las ideas del libro... si tienes un rato igual te interesa :)
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