"En los llanos, las protestas por la ineficiencia en los servicios públicos y el desabastecimeinto de alimentos van en aumento, al igual que los casos de detenciones arbitrarias"    

La carta corresponde a una entrevista dirigida a Roland García, presidente de la Fundación de Derechos Humanos de los Llanos Venezolanos (Fundehullan), y de la Red Justicia y Libertad. 

Los llanos venezolanos están compuestos por cinco Estados: Apure, Barinas, Cojedes, Guárico y Portuguesa. Yo, por mí parte me encuentro en Barinas, Estado caracterizado por ser la tierra donde nació Hugo Chávez, que, a su vez, ha sido el epicentro del surgimiento de múltiples organizaciones de derechos humanos.  

Los llanos se han caracterizado por ser una zona vulnerable debido a las constantes violaciones contra las organizaciones de la sociedad civil que defienden los derechos humanos; un lugar donde la censura permea contra la prensa libre e independiente. Tal y como sucedió el 11 de junio 2020 a las afueras de Fundehullan, donde dos hombres motorizados, uno vestido con el traje de la policía municipal de Barinas, me confiscaron mis equipos de trabajo; un caso del cual, al día de hoy, no he tenido respuesta del Ministerio Público.

Frente al panorama actual que vivimos en los llanos, hemos evidenciado que el Estado ha aprovechado la cuarentena para violar derechos humanos. Uno de los aspectos más preocupantes de esto, ha sido la ineficiencia en las investigaciones realizadas por las autoridades para esclarecer las agresiones, como es el caso de Wilmer Mendoza, radiólogo asesinado el 23 de enero de 2019 por asistir a una protesta de la oposición en la ciudad de Barinas. Mientras tanto, en los llanos, las protestas por la ineficiencia en los servicios públicos y el desabastecimiento de alimentos van en aumento, al igual que los casos de detenciones arbitrarias, tal y como se registra en nuestro informe “violaciones a los derechos civiles y políticos en el contexto Covid 19”.  

La grave situación de derechos humanos en los llanos no es nueva. Es por esto que desde mayo del 2017 creamos la Red Justicia y Libertad, con el fin de apoyar a presos políticos y activistas de derechos humanos en Venezuela. Además, en julio del 2020 constituimos el primer Observatorio de los Llanos venezolanos para documentar agresiones contra derechos fundamentales ocurridos principalmente en los Estados de Barinas, Cojedes y Portuguesa. Bajo este marco, actualmente en Fundehullan seguimos atendiendo casos que veníamos trabajando desde el 2019, a través de asesorías y acompañamientos jurídicos de víctimas que han sufrido agresiones por parte del Estado.

A pesar de nuestra importante labor, considero que, como Sociedad Civil, tenemos el gran reto de articularnos. Debemos fortalecer nuestro tejido social para seguir documentando, denunciando y monitoreando las violaciones contra los derechos humanos. Tenemos que organizarnos, porque nuestra labor está en defenderlos exigiendo su plena garantía y amparo desde la justicia.  

Por último, hago un llamado para que las organizaciones, tanto nacionales como internacionales, enfoquen su atención en el panorama actual en los llanos venezolanos, a través de nuestra cuenta de Twitter @FundehullanVzla.