Ayer fue luna llena. La primera de este otoño. Hace mucho tiempo que me fijo en esa gran roca redonda y le sigo la pista. Me alegro de que nuestra historia como especie esté tan estrechamente ligada a la suya. Es la luna quien tira de los océanos hacia sí, igual que lo hace de nosotras, las personas, que al fin y al cabo somos agua mayoritariamente. ¿Sentís su compañía? Porque, probablemente, sin ella no estaríamos aquí.
Bajo la última luna nueva, el pasado 17 de septiembre inauguramos la exposición Time Bends We Come Closer, de Pedro Torres. Ese fin de semana corrimos la maratón del Barcelona Gallery Weekend y de las jornadas de Hangar Obert, el centro de producción e investigación donde Pedro es artista residente. Con él, los 42 km 195 m explicando las bondades de la fuerza de la gravedad y la curvatura del espacio-tiempo se hicieron un paseo. A partir de ahora seguimos a paso más tranquilo por este proyecto.
La exposición se puede ver hasta el 7 de noviembre y entre medias, vamos a celebrar otras visitas con el artista para quienes no asistieron a una de las muchas que hicimos durante el Gallery. Aún queda sitio para la del miércoles 14 de octubre, a las 19 h. Podéis apuntaros aquí.
Quedan reservadas algunas sorpresas para más adelante. Por ahora, como siempre, en esta carta encontráis otras posibles paradas entre ciclos lunares.
👉 Para esta exposición, Pedro Torres ha reparado mucho en la danza y varias de las piezas están conectadas a ella. Una es Arm Bending y durante el proceso creatvio, Pedro siempre tuvo la mano de Yvonne Rainer como referencia. La bailarina y coreógrafa estadounidense realizó la película Hand Movie en una cama de hospital mientras se recuperaba de una cirugía. Con esta pieza amplió su repertorio al cine experimental e inauguró su serie Five Easy Pieces para afirmar los principios de su No Manifesto en 1965: “No al espectáculo. No al virtuosismo ". Desde todos los ángulos posibles, su mano adquiere aquí una dimensión escultórica, que también confiere Pedro a su exposición.
👉 Otra forma también amable de acercarse a las teorías físicas recientes es la película La teoría del todo, sobre la vida de Stephen Hawking. El hombre que vemos experimentar la ingravidez en esta foto, dedicó su vida a estudiar el universo y estaba particularmente obsesionado por los agujeros negros. También se enfrentó al drama de una cruel enfermedad, la esclerosis lateral amiotrófica (ELA). Lo que cambió todo fue hacerlo con el inestimable apoyo, amor y compañía de la que fue su luna durante mucho tiempo, su primera esposa, Jane Wilde. Probablemente sin ella, Stephen tampoco habría llegado a estar donde estuvo.
Hoy rescato su respuesta ante la gran pregunta que se le plantea sobre si, al no creer en Dios, tenía alguna filosofía de vida que le ayudara:
"Está claro que solo somos una raza avanzada de primates en un planeta menor que gira alrededor de una estrella muy corriente en el borde de una de las 100.000 millones de galaxias. Pero desde el principio de la civilización, la gente siempre ha ansiado entender el ordenamiento interno del mundo. Tiene que haber algo muy especial en las condiciones de los límites del universo. Y qué puede ser más especial que el hecho de que no haya límites... Tampoco debería haberlos para el emprendimiento humano. Todos somos distintos. Por muy dura que nos parezca la vida, siempre hay algo que podemos hacer y en lo que podemos triunfar. Mientras haya vida, hay esperanza."
👉 Algo de eso que dice Stephen Hawking impregna también la filosofía de esta habitación. Porque es difícil pensar que el arte pueda separarse de la esperanza y dignidad humanas y estas palabras de nuestra querida Adrienne Rich son la razón de existir de Chiquita Room. Que sea un lugar para descubrir el arte de forma abierta, cercana y sensible, para explorar nuevos límites en cada proyecto. Sea para hablar de árboles o de la curvatura del espacio-tiempo, aquí la confianza de que el arte puede ayudarnos a vivir mejor es total.
Clàudia Rius, jefa de redacción de Núvol, el digital de la cultura en catalán, vino de visita y lo explica bien bonito en este artículo. Desde aquí un brindis por el periodismo humano, ese de boli y libreta, y todo el agradecimiento del mundo por compartir el espíritu de este proyecto con tanto cariño.
🌕 Hoy me despido con un cielo iluminado por la canción Moonlit Sky de Colleen. Volemos hasta la luna para empezar un fin de semana sideral.
📸 Créditos
1. Pedro Torres | Cecilia Díaz Betz
2. Hand Movie | Yvonne Rainer
3. Stephen Hawking | Zero Gravity Corp AP
4. Laura González Palacios | Laia Serch
