Es una de las mejores charlas TED que recuerdo. Es clara, concreta, divertida... 14 minutos que merecen la pena (si eres fan de Brooklyn Nine-Nine apreciarás la broma).
La hizo Tim Urban hace unos años, y en ella hablaba de la procrastinación.
(Puedes ver la charla aquí, o leer el artículo en la que se basa aquí).
Tim describe tres personajes principales en esa obrilla de teatro que es nuestra mente:
- El "Tomador de Decisiones Racionales": un personaje sensato, que sabe lo que hay que hacer, y que toma decisiones lógicas en consecuencia. En un mundo perfecto, nuestra vida sería guiada por él, y todo nos iría la mar de bien...
- El "Mono de la Gratificación Instantanea": revoltoso, alborotador... solo piensa en hacer cosas fáciles y divertidas, y no quiere saber nada de todas esas cosas que "deberíamos hacer"... pero que no molan.
El gran problema es que el mono es muy pesado.
Intensísimo.
Ingobernable.
El "Tomador de Decisiones Racionales" no puede con él.
Y como consecuencia, el mono le roba el timón, y se pone a tomar decisiones.
Es culpa del mono que te despistes con cualquier chorrada que pase por tus redes sociales (bueno, y de los que diseñan las redes sociales; pero ésa es otra historia). Es culpa del mono que acabes comprando una bolsa de patatas fritas en vez de las más saludables judías verdes. Es culpa del mono que pases la tarde "haciendo nada" mientras las tareas se te acumulan.
Lo fácil y divertido por encima de lo que conviene.
Maldito mono.
Recordarás que te hablaba de tres personajes. Y es que, además del "Tomador de Decisiones Racionales" y del "Mono de la Gratificación Instantánea" está el "Monstruo del Pánico".
Lo bueno del "Monstruo del Pánico" es que el mono le tiene... pues eso, pánico. Cuando aparece el monstruo, el mono huye. Y ahí, por fin, el "Tomador de Decisiones Racionales" puede volver a tomar el timón, y hacer las cosas que hay que hacer (aunque no sean ni divertidas ni fáciles).
Lo malo del "Monstruo del Pánico"... es que solo se activa a última hora, cuando te va a pillar el toro. Cuando tienes una fecha de entrega. Cuando hay una consecuencia cierta e inmediata de no actuar. Como que si no presentas la declaración del IVA te sancionan. Como que si no te presentas al examen, suspendes. Como que si no pagas el recibo de la luz, te la cortan.
Pero si no... el monstruo no aparece, y el mono sigue haciendo de las suyas.
Lo cual es una puñeta para todas esas cosas que no tienen una fecha límite, ni una urgencia.
¿O no te ha pasado a ti que tienes esas cosas pendientes desde hace mil años, esos buenos propósitos, esos planes eternamente postergados? ¿Todo eso "importante pero no urgente"?
"Ya lo haré", piensas, mientras le das a "siguiente episodio" en Netflix.
Pues ya sabes de quién es la culpa.
PD.- Tim Urban tiene un par de artículos adicionales con recomendaciones sobre cómo intentar domar al mono... te los dejo aquí por si quieres leerlos... algún día... si el mono te deja.
https://waitbutwhy.com/2013/11/how-to-beat-procrastination.html
https://waitbutwhy.com/2015/03/procrastination-matrix.html
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