¡Hola <<Nombre>> !
Las películas tocan nuestros corazones, despiertan nuestra visión cambian nuestra forma de ver las cosas. Nos llevan a otros lugares. Nos abren las puertas y las mentes. Las películas son los recuerdos de nuestra vida
Martin Scorsese
No quiero hablar de la ceremonia de los Oscars porque la vio menos que nadie y porque ya pasaron dos días. Pero hubo algo que me quedó dando vueltas: la frase de Frances McDormand, la protagonista de "Nomadland" que subió dos veces al escenario para recibir premios. Dijo: "Vean las películas en las pantallas más grande que puedan".
Así de simple. Y de complejo.
En ese momento me pregunté si era una provocadora en medio de una ceremonia que estaba premiando muchas producciones que sólo pudimos ver por Netflix, Amazon, Disney +, o una nostálgica de los buenos viejos tiempos (que incluyen las salas de cine que el año pasado cerraron de a montones en todo el mundo porque permanecieron cerradas 11 meses y no resistieron al golpe de la pandemia).
Quizás las dos cosas: provocadora y nostálgica.
Porque es cierto que tendemos a mirar con un poco de sorna toda esa puesta exagerada de los Oscars (que este año, fue deslucida, aburrida y poco acertada), todo ese brillo que juzgamos absurdo, todo ese bótox, todo ese vestuario impagable para nosotros, simples humanos de este lado de la pantalla. Pero no es menos cierto que esa industria que juzgamos muchas veces superflua, alimenta desde la super estrella de Hollywood al utilero, pasando por peinadores, vestuaristas, guionistas, iluminadores y hasta el último dueño de la sala de cine más pequeña de la ciudad más remota del mundo.
Pensé que no podemos ser desagradecidos con lo bien que nos ha hecho maratonear series y ver películas que, de no existir el streaming, no hubiéramos visto (y además, la cuarentena hubiera sido sin dudas peor).
Pero pensé también que sería una pena que el cine languideciera y se achicara hasta quedar del tamaño de una pantalla de tevé, por grande que esa pantalla sea. Porque la experiencia del cine, y sobre todo lo que la experiencia del cine implica, merece una pantalla enorme, y oscuridad, y esa sensación de estar todos juntos (aunque distanciados) a merced de una historia.
Nos vemos la semana que viene
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