Un token no fungible (NFT) es un activo criptográfico que tiene la capacidad de ser único e irrepetible. Gracias a la tecnología blockchain las propiedades de este tipo de token se pueden almacenar y, de esta manera, se vuelve posible certificar tanto la originalidad del activo como su propiedad. Esto se consigue mediante un smart contract, que además abre la posibilidad de comercializarlo.
La idea de los NFT surgió junto a la tecnología blockchain en 2014, pero no se popularizó hasta la aparición de la criptomoneda Ethereum, que incluía un sistema para la creación y almacenamiento de tokens no fungibles.
|