Reflexión de la Newsletter #52
El otro día, hablando con un compañero sobre las acciones que su marca llevaría a cabo en el Black Friday, me preguntó si haría algún tipo de descuento.
En el caso concreto de EXPRESSAN, ésta no vende directamente artículos de arte o diseño y, en los programas de comisariado que promociona, no ha llegado esa tendencia. En todo caso, no encuentro el sentido a realizar ofertas que cambian de un día para otro, ya sean Black Friday, Ciber Monday o cualquier día de la semana con un adjetivo adosado.
En la industria cultural y creativa si alteramos el equilibrio en la cadena de valor corremos el riesgo de que se devalúe nuestro trabajo. Es más, la presión del mercado no puede obligarnos a hacerlo justo ese día.
¿Acaso tiene sentido entrar en una web el jueves y ver un precio x, y entrar el viernes y verlo con otro precio distinto? ¿Cómo te sentirías si fueras ese cliente que lo compró ese jueves porque lo necesitaba o porque creía que era un precio justo?
Me encantaría saber tu opinión al respecto.
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