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A punto de cerrar el año, la decisión del gobierno municipal de Sitges de parar durante un año la concesión de licencias a apartamentos turísticos volvía a golpear el sector. Se ha optado por la solución fácil, una solución que multiplicará el alojamiento ilegal y hará que la actividad quede totalmente fuera de control. Por contra de lo que muchos piensan, sabemos que el paro de licencias no tendrá una afectación positiva en el precio del alquiler en el municipio que, seguirá subiendo, con o sin moratoria. Parece que empezamos el año como lo acabamos y de seguir así el 2017 puede convertirse en el año de la turismofobia, de la que muchos ya hablan como una realidad. Es muy pronto aún para saber qué pasará, pero de lo que si estamos seguros es que el desarrollo final del PEUAT marcará el año y puede marcar también el destino del sector.
Enrique Alcántara
-presidente APARTUR-
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